Impresionante. No existen más palabras para describir lo que se vivió ayer por la noche en la sala Ballroom del Hotel Sheraton. Con más de 600 personas se llevó a cabo la subasta y sorteo por los palcos del futuro Estadio de Peñarol (que cada vez está más cerca de concretarse), y fue un verdadero éxito. El minuto a minuto lo pudiste seguir por nuestro Twitter y Facebook.

El comunicado que había enviado Peñarol a los titulares y autorizados para participar de este evento los citaba a las 20.00 horas, pero ya desde las 19.00 se veía un gran movimiento de gente, tramitando las acreditaciones correspondientes.

Poco más de las 20.30 horas, se abrieron las puertas y comenzaron a entrar todos los interesados a la sala que estaba toda decorada con los colores que nos representan. Luego de ver algunos videos sobre la historia de nuestro glorioso Club, y también del proyecto del Estadio, se dio a conocer la forma en que sería la subasta y el sorteo.

Del total de 115 palcos que el Estadio tendrá, 112 eran los que se encontraban disponibles. Los 57 palcos centrales fueron los que se subastaron, con la base de 1.290.000. Los 55 restantes, se sortearon, haciendo pesar los años de antigüedad. Vale la pena destacar que si bien sólo había 112 palcos disponibles (los tres restantes para sumar 115 fueron destinados 1 a la transmición de TV y los otros dos al Club), 130 personas fueron las que señaron, es decir que 18 se quedaron sin la posibilidad de obtener uno. Obviamente, a estas 18 personas que había señado y no tuvieron la posibilidad de adquirir uno, se les dio la chance de comprar butacas preferenciales, y de no aceptar, se les devolvía el dinero.

Luego, se dictó la lista por años de antigüedad de las 130 personas que habían señado los palcos para saber en la situación que se encontraban. Y poco después… comenzó la subasta.

Imagen de @gerardorabajda

El primero se fue a 2.290.000 pesos, es decir, 1.000.000 más de la base. Los afortunados compradores fueron los representantes Chijane y Rabajda, y eligieron el palco 119, es decir, en el primer piso, bien al centro. A cada comprador se le iba entregando la camiseta oficial con el número del palco adquirido y la inscripción 8 de noviembre. El segundo se fue por 2.140.000, 850.000 pesos más de la base y el comprador fue Etchegaray, eligiendo el palco número 122, bien al centro, hacia lo que sería la Colombes. Y así continuó la subasta, con precios elevados y hasta impensados por muchas personas, pero claro, Peñarol genera eso: la marca más importante del país, la que más vende, y los palcos no se iban a quedar atrás.

Los primeros 10 se fueron a un promedio de 2.111.000 pesos cada uno, algo que solo Peñarol puede lograr. Entre los compradores de estos, podemos encontrar a la familia Damiani, a Devoto, entre otros.

El décimo primer palco se subastó por 1.990.000 pesos y el siguiente se fue por 2.040.000, lo que hacía mantener el promedio a un muy buen precio para los intereses del Club. Entre la segunda decena de palcos subastados, encontramos al delegado Jorge Barrera, quien se mostró muy contento por la adquisición del palco 217.

El número 22 fue para Edgar Welker, quien eligió la ubicación 224. El palco número 30 fue para Diego Aguirre, quien pagó 1.940.000 pesos por la ubicación 127. Y así continuó la subasta, disminuyendo como es lógico el precio de los mismos, pero a un muy buen precio.

El último se fue por 1.750.000 pesos, y de esta forma se cerró la subasta por los 57 palcos centrales. En total, por la venta de estos 57 palcos centrales se recaudó 108.820.000 pesos. Este número está compuesto por 73.530.000 (1.290.000 que era la base x 57), sumando los 35.290.000 que fue el total aparte de la base. El promedio de la subasta fue de 1.909.123 pesos. Números que rompen los ojos.

Finalizada la subasta, se invitó a los presentes a tomar un descanso y refrescarse, para luego dar comienzo con el sorteo.

Luego de haber ordenado la lista de los restantes con la antigüedad correspondiente, empezó el sorteo. Los 55 con más años de antigüedad fueron los que entraron al sorteo, quedando afuera 18 personadas interesadas. Se iba diciendo el nombre de la persona en la lista y se sacaba la bolilla con la ubicación del palco en el Estadio. Uno podía optar por aceptar ese lugar, o de lo contrario, bajarse del sorteo y quedarse sin palco. Así se fueron los 55, en medio de un clima de festejo, nerviosísimo, y alegría.

Para redondear, al club con la venta de estos 112 palcos, generó 180.000.000 millones de pesos aproximadamente, es decir, unos 9.000.000 de dólares si tomamos el dólar a 20.

1.800.000 dólares más se generaron gracias a la subasta que fue todo un éxito.

El Estadio está cada vez más cerca.