Peñarol derrotó 6 a 5 a Bella Vista y se consagró campeón del cuadrangular amistoso Copa Casil. Más allá del resultado, donde siempre importa ganar, hay que destacar que la ronda final se jugó en el Palacio Peñarol, y ojalá esto sea el puntapié inicial para que vuelva la práctica de deportes menores a nuestra casa. Para remarcar, las tribunas fueron una fiesta, con verticales, trapos, bombos y mucho color, y además, se recaudó una suma importante de alimentos no perecederos, los cuales serán donados a las escuelas de Pueblo Peñarol.

En cuanto a lo futboolístico, dos tiempos totalmente distintos. En la primera parte, si bien Peñarol fue superior, finalizamos cayendo 2 a 1. La clave estuvo en que erramos muchísimos goles, tanto por virtud del portero papal, como por falta de puntería de los nuestros.

En el segundo tiempo se revirtió la situación. Nos volvieron a anotar, y arrancamos con el marcador de 3 a 1 en contra. Sin embargo, rápidamente descontamos y empatamos, siendo éste un momento decisivo en el partido. Con el aliento de la hinchada, el equipo de Peñarol volvió a crecer y se puso 4 a 3 a favor. Pero esto es futsal, y cambia constantemente. Bella Vista se fue arriba 5 a 4, y el partido se tornó trabado, y sobre todas las cosas, muy intenso. Los jugadores sabían que tenían que darle una alegría a toda la gente que se arrimó al Palacio, y con jugadas de pelota quieta sellaron el 6 a 5 final.

Una nueva copa en las vitrinas de este deporte que cada día crece más en nuestra institución. Ahora sí, el escenario se preparará para lo que será la Copa Libertadores del año que viene en esta disciplina que tendrá a Peñarol como locatario. El Palacio fue una fiesta, esperemos que a futuro lo siga siendo.

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Desde la tribuna|T2qJW5gngEY
Incidencias del partido|BjA60oCQWbM
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