Mario Saralegui, actual director técnico de Peñarol, habló en el programa 100% Deporte de la Sport 890.

Partido frente a Colo Colo: «El primer tiempo fue muy bueno. Creo que deberíamos haber hecho otro gol, tuvimos chances. Nos desgastamos un poco y eso lo pagamos en los primeros minutos del segundo tiempo. No pude hacer bien la lectura. Gargano seguramente no iba a poder estar los 90′, y el rival movió muy bien las piezas. Taparon muy bien a nuestros delanteros, sacaron un volante central, tomaron hombre a Terans, y pusieron un enganche entre Gargano y Trindade. Los primeros minutos estábamos perdidos, presionaron más arriba, demoré el cambio de sacar a Gargano. Lo ví tan bien en el primer tiempo, que me tomó de sorpresa. Mouche insistió, no pudimos cerrar la jugada y llegó el primer gol en una jugada puntual. No me gusta personalizar el tema, no hablo de jugadores. Lo de Gargano te lo digo, porque era evidente que se empezó a cansar. Luego cometió el penal, y el culpable fui yo. Quedé como paralizado y no pude leer el partido, y cuando quise ver íbamos perdiendo 2 a 1. El cambio de Terans es porque lo estaban tomando hombre, lo seguían y no podía agarrar la pelota. Pensé que poniendo otro delantero, podíamos intentar tirar la pelota más larga. Después que perdés, el cambio esté mal hecho».

Inclusión de juveniles: «Ahora todos hablan de proyectos. Peñarol tiene uno de hace más de 10 años, pero se hace difícil ponerlos a jugar. Hay mucha presión, mueve mucho, la hinchada exige, Peñarol es esclavo de su historia, es pesado. En un equipo chico es más fácil poner juveniles. Acá tenemos que ganar todos los domingos, no tenemos mucho margen. El otro problema es que se venden muy seguido. Recibimos el dinero, pero no tenemos en la cancha el valor real del proceso. Es la realidad y hay que afrontarla. Hay que buscarle la vuelta a que no se vayan tan rápido. Si Peñarol tuviera a todos los que vendió, tendría un gran equipo. Hay que encontrar en el club un equilibrio económico, ya que necesitamos tener más claridad para prever un  montón de cosas. No he hablado de una posible transferencia de Pellistri. Esperemos que no se vaya en los próximos días al menos, no se puede ir ningún jugador de acá»

Recta final del primer semestre: «Se viene una semana fundamental. Nos quedan 6 partidos, que marcan el término del torneo local y la Libertadores. Estamos todos muy ansiosos porque necesitamos pasar de fase. Tenemos que vencer el temor, para hacer lo que tenemos que hacer. Yo me estoy jugando en 6 partidos muchas cosas. Yo sé en que situación vine, lo tengo claro. Una cosa es el Peñarol ideal, el que sueña el hincha, el dirigente: el Peñarol de antes. Eso no está ahora. Con esto que tenemos, tenemos que ir para adelante y pelear cada partido como si fuera el último. Luego de eso, analizarán y tomarán las medidas necesarias. Contra Plaza van a jugar los que estén bien. Después, en la altura, yo que sé. Somos conscientes de que tenemos que traernos algo de allá. La altura es especial, hay que tomar ciertas precauciones. No sé si es un partido para los jugadores más jóvenes. Nosotros pensábamos traernos al menos un punto de Chile. La Copa no terminó todavía. Obvio que digo lo que quiere escuchar el hincha de Peñarol. ¿Qué voy a decir? ¿Lo que quiere escuchar el hincha de Nacional? Tenemos que ser realistas con lo que tenemos. Soy un convencido de que si mantenemos el nivel del primer tiempo del otro día, es otra cosa».

Encuentro frente a Torque: «Nosotros no regalamos nada. Pusimos un equipo alterno, porque la prioridad era Colo Colo, y necesitábamos que llegaran bien los jugadores. El problema es que los suplentes tienen muy pocos minutos. La necesidad de ganar los dos torneos es un problema que conlleva que en algunos partidos no vayan a estar los que juegan siempre, y se va transformando en un círculo vicioso. Acerca de Nicolás Franco, si yo no veo a los jugadores, no puedo saber el rendimiento que tienen. Franco estaba hace tiempo en el club, jugó en Tercera. Lo había visto poco. Hay que tomar decisiones y no es fácil. Si vos ganás, cantás con guitarra; si no ganás, cantás sin micrófono».

Cebolla Rodríguez: «El Cebolla tuvo un golpe en el partido contra Torque, pero parecía un tema menor. En la mañana tuvimos un entrenamiento, se le inflamó y no podía caminar. El quería estar de cualquier manera, esperamos hasta el final, pero no se pudo. Estamos viendo el tema, a ver si es el golpe u otra cosa más grave. Se empiezan a hablar cosas que no tienen que ver con la realidad, y uno se molesta bastante. Lo de que no quiere jugar está en el terreno de la imaginación de la gente. Hay gente que habla como hincha, porque ama al club y pierde el control, es normal. Lo que me molesta es la gente que habla con mala intención. Contra Plaza no está el Cebolla, esperamos que esté para jugar en la altura».

Apoyo dirigencial: «Estamos acá trabajando, haciendo lo mejor para Peñarol, y tenemos un apoyo total de los dirigentes. Evaristo González fue a Chile, estuvo allá con nosotros, aunque no estuvo de acuerdo con mi llegada. Colaboró, participó, lo mismo los demás. Sabemos que hay un acto electoral detrás, pero eso está en un plano secundario ahora. Nosotros tenemos la obligación de ganar, y si ganas se tranquiliza todo».

Incorporaciones: «Si podemos vamos a traer un delantero. Todavía no lo tengo, es difícil. A mi me gusta por ejemplo Arezo, el de River, y la semana pasada tengo entendido que lo vendieron en 18 millones de dólares. Hay que tener un equilibrio económico, no se puede hacer una locura. No tenemos la plata. Junior Arias está dentro de los nombres que estamos manejando, yo no hablé con él. Se han manejado muchos. Tiene que ser un jugador que esté en actividad. No podemos traer un jugador de un equipo que todavía no haya empezado a jugar. Todavía no lo trajimos porque no lo encontramos».

Recibimiento en el hotel al regreso de Chile: «La hinchada de Peñarol nunca me puteó, ni me va a putear. Fui a saludar a los hinchas que se acercaron a criticar. Hay cosas que hay que tenerlas claras, mañana pueden ser 50, y pasado 500. Si nosotros no ganamos, es entendible, y va a seguir pasando. Es una molestia que se viene arrastrando de hace tiempo. Los que estamos acá tenemos que afrontarlo, y ganar. Sino, el proceso no se cumple, todos nos vamos, y se arranca de 0. Eso es así».