Juan Guillermo Castillo habló en PYD Radio en la previa del debut ante River Plate por el Torneo Clausura. «Hemos trabajado muy bien durante la semana, ha sido bastante intensa con varios dobles horarios y estuvo un poco complicado con el estado del campo de juego, debido al tiempo. De todas formas pudimos trabajar intentando tomar la idea del nuevo cuerpo técnico. Trataremos de que el domingo ya podamos aplicar el sistema».

El cambio de entrenador se dio en la recta final de la pretemporada, y agarrarle la mano al cuerpo técnico es una de las cuestiones más importantes. «Esperemos que cueste el menor tiempo posible. Hay muchos jugadores del plantel que conocen a Jorge (Fossati), y eso facilita el aprendizaje del nuevo sistema. Darío es el que más lo tuvo, en la selección y el bola en Danubio. Esperemos que podamos aplicar el sistema de forma correcta el domingo, tratar de disimular las falencias y ganar como sea».

El gran cambio que se dio con la llegada de Fossati fue en la línea defensiva, donde se pasó de cuatro defensas a tres zagueros y dos carrileros. «Es un poco diferente, quizás con línea de 4 el que oficia de libero, es el arquero. En la línea de 3 hay tres zagueros y uno es el que oficia de libero, quizás el arquero tiene que estar un poco más adelantado por los pelotazos en diagonal, para salir a cortar afuera del área. Obviamente que el ordenamiento y el funcionamiento de la línea de zagueros cambia sustancialmente sus movimientos con respecto a una línea de 4. Para mí no es un sistema nuevo, he jugado varias veces con línea de 3 y no creo que vayamos a tener inconvenientes».

Jorge Fossati se mostró conforme con los goleros de Peñarol y lo ha ratificado en el puesto. «Es un respaldo importantísimo. Jorge fue el primer entrenador que me citó a la selección, me conoce hace mucho tiempo. Primero como rival, él estando en Danubio y yo en Defensor, y después me cita a la selección. Es un voto de confianza muy importante en un momento difícil y obviamente espero responderle al máximo a esa confianza con buenos rendimientos. Ojalá podamos encaminar esta situación lo antes posible y el domingo empezar ganando».

Sobre la distancia que lo separa del gran rendimiento en su pasaje anterior, Castillo confesó que «sucedieron errores puntuales que quizás se magnificaron bastante por el hecho de haber perdido. Hice algunos partidos correctos, el clásico muy bien. Fue un semestre con muchos altos y bajos. Hay que tratar de mantener una regularidad y ojalá se pueda lograr en este semestre que lo precisa Peñarol y lo preciso yo».

Con el Mundial a la vuelta de la esquina, la presión y los nerviosismos le pueden jugar una mala pasada a los futbolistas. Sin embargo, el arquero de Peñarol declaró que intenta aislarse totalmente para no tener una presión extra. «Simplemente tengo que rendir en Peñarol y si uno lo hace y las cosas van como yo me lo planifico en mi mente, me imagino estar en el mundial. Rendir bien y estar bien para poder defender ese lugar privilegiado».

Además del Torneo Clausura, estamos a 12 días del debut en la Copa Libertadores, pero el plantel todavía no se adelanta. «Estamos focalizados en comenzar bien el campeonato que nos va a brindar una confianza importante, contra un rival duro como es River que es uno de los que va a pelear el campeonato. Eso es el primer escollo que tenemos que superar para después pensar en Defensor y después en la Copa».

Por último, el futbolista se refirió a la versión que había trascendido de un supuesto enfrentamiento con Bizera en la sede de la Mutual. Él lo desmintió en Hora 25, y dijo que «no sé cuál fue la intención de meterme en esa supuesta discusión que no existió. Conozco a Joe (Bizera) y conozco a Andrés (Scotti) y sé que no hubo ninguna discusión. Si la hubiera habido tampoco pasaba nada pero no existió. Se creó como una especie de chusmerío que fue bastante desagradable pero ya pasó».

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