Hernán Menosse, zaguero de Peñarol que jugó como titular el clásico, habló en Padre y Decano Radio en Radio 1010 AM: lo que vivió adentro de la cancha, la familia, el momento del equipo en el Campeonato Uruguayo y la fiesta en las tribunas, «agradezco a la gente por lo que nos hizo vivir el domingo». 

Debut triunfal ante el viejo rival: «La verdad es que estoy contento, no era nada fácil. Era un partido con el rival de siempre, vida o muerte porque necesitábamos sumar de a tres porque no habíamos tenido un buen arranque. Sabemos que los clásicos no se juegan, se ganan y en lo personal sabía que me jugaba mucho. Era mi debut en el Campeón Del Siglo, nunca había jugado en casa, es una sensación única porque uno siempre soñó con esto. Debut con triunfo, es especial».

Hincha de toda la vida: «Tuve  la suerte de jugar el clásico rosarino, el de Cali, son clásicos picantes, pero este era especial, lo viví diferente porque es el cuadro del que yo soy hincha, siempre lo soñé. Uno en el barrio jugaba los de Peñarol de un lado y los de Nacional del otro, hoy poder estar ahí en el estadio, viviendo lo que eran las tribunas, es inexplicable. Era difícil, había mucho nervio pero con el correr de los minutos uno va agarrando confianza, pensando en la familia y los amigos, sacamos un partido muy bueno».

El orgullo de todo un país: «Sin ninguna duda no tuvimos un buen arranque, hicimos todo para ganar, no merecíamos ni el empate ni la derrota. Salimos a ganar en todas las canchas, esto era diferente, un clásico. Había que sumar de a tres, la planificación de Mauricio (Larriera) fue excelente. Queríamos esperar los primeros 10 o 15 minutos y después salir, creo que salió bien. Después con un hombre de menos se complicó pero mostramos la jerarquía del equipo y la amistad que hay en el grupo. Un grupo sano y humilde, dejamos todo. Nos pudimos abrazar al final y poner al país en orden».

Trabajo, humildad y sacrificio: «Me sorprendió hasta demasiado lo bien que me han tratado, uno viéndolo de afuera especula y analiza con qué se va a encontrar. Me llamó la atención el grupo, concentración y humildad a la hora de trabajar, eso hace más fácil la integración, los funcionarios también son excelentes. Ojalá que podamos trepar en la tabla para ser campeones».

Defender la causa: «Son momentos de partido, cada uno defiende lo suyo y queda adentro de la cancha. Los clásicos son así, los partidos de fútbol son 95 minutos, hay que disfrutarlos con respeto, estuvo lindo».

Fiesta en dos colores: «Tenía muchas ganas de ver el Campeón Del Siglo de esa forma. Tener a la familia y a los amigos ahí. Ver el color y la alegría de la gente fue único, me tocó hace muchos años ir a alentar a Peñarol y la verdad que el domingo no lo podía creer. Le agradezco a la gente por lo que nos hicieron vivir desde la llegada al estadio, hasta el último minuto. Nos ayudaron a ganar con un hombre de menos».