Copa Intercontinental 1966
Peñarol consiguió su segunda Copa Intercontinental en 1966 tras derrotar al poderoso Real Madrid en dos partidos apasionantes donde el amarillo y negro fue superior al blanco. Con dos contundentes 2 a 0, supimos vengarnos de aquella dolorosa derrota sufrida en la primera final del mundo, en 1960. El 12 de octubre se disputó el primer partido en Montevideo y el 26 de octubre se disputó la segunda final en el Estadio Chamartín, conocido actualmente como el Santiago Bernabeú. Peñarol, el mejor de América, derrotaba al Real Madrid, el mejor de Europa. La figura de la serie fue Alberto Spencer, quien marcó 3 tantos.
El 12 de octubre se disputó el partido que abría las finales. Ante 60.000 espectadores, el histórico Roque Gastón Máspoli alineó a Ladislao Mazurkiewicz, Juan Vicente Lezcano, Luis Alberto Varela, Tabaré González, Néstor Gonçalves, Omar Caetano, Julio César Abbadie, Julio César Cortés, Pedro Virgilio Rocha, Alberto Pedro Spencer y Juan Joya Cordero. Con dos goles de Spencer, a los 39 y a los 79, Peñarol aseguraba el primer partido y viajaba con muchas expectativas para la revancha.
El 26 de octubre de 1966 Peñarol se coronaba Bicampeón del Mundo tras derrotar nuevamente al Real Madrid, esta vez en tierras españolas. Con un marco de 50.000 espectadores en contra, los dirigidos por Roque Máspoli fueron en busca de la victoria en vez de defender el 2 a 0 conseguido en Montevideo, y de esa forma se logró otro categórico 2 a 0 que determinó un global de 4 a 0.
Para la revancha, Máspoli nuevamente alineó a Ladislao Mazurkiewicz, Juan Vicente Lezcano, Luis Alberto Varela, Tabaré González, Néstor Gonçalves, Omar Caetano, Julio César Abbadie, Julio César Cortés, Pedro Virgilio Rocha, Alberto Pedro Spencer, Juan Víctor Joya.
Los tantos de aquella jornada fueron anotados por Rocha de tiro penal y Alberto Spencer tras gran jugada personal.
Memoria y Balance de 1966
La última hazaña fue Madrid… Comenzó a asomar cuando el 12 de octubre, Peñarol derrotaba en Montevideo por dos a cero al cuadro “merengue” de Bernabéu. La esperanza de una consagración final cruzó el Atlántico y volvió en forma de canto: Y dale, dale…los Peñaroles…”
La segunda consagración mundial del club de las once estrellas estaba decretada. Europa miró asombrada al gran Peñarol, al Peñarol que derrotaba al monarca europeo en su propio terreno, en su propia cancha; la misma que mostraba un récord impresionante: 20 años sin perder.
Pero Peñarol estaba en su destino…
Rocha primero y Spencer después fueron los implacables verdugos en la noche del 26 de octubre. El camino del triunfo lo abrió Pedro Rocha con gol de penal. Con total serenidad, el salteño colocó la pelota junto al primer palo, de rastrón, venciendo a Bentancourt. A los 37 minutos, Europa comenzaba a enmudecer.
Luego Alberto Spencer marcaría el segundo para Peñarol. Fue una jugada inolvidable y llena de ritmo entre Joya y Spencer, con una rúbrica genial, digna del mejor fútbol del mundo. Ya los reflectores de Chamartín iluminaban las once estrellas aurinegras.
Así fue como Europa quedó asombrada. Máspoli supo plantear el partido, cubriéndolo de todo riesgo y manteniendo las posibilidades de azotar al encumbrado adversario. Y así se hizo realidad el gran triunfo para la mejor eclosión del pueblo peñarolense, que cubrió de amarillo y negro nuestro Montevideo.
La tradición de un fútbol glorioso, de un pueblo que nació para confiar en sus campeones y unirse en el sencillo ritual de la esperanza. Ritual que tiene hoy ritmo de candombe y nos une a todos los peñarolenses en la alegría de su letra….”Y dale, dale, los peñaroles…”
Discurso de Cataldi (Secretario General en ese momento) :
«Señoras y señores: los atletas se citaron con la gloria y entonaron al compás de sus esfuerzos, el himno victorioso. Músculo y espíritu, resorte uno del otro, comulgaron una misma ansiedad y exigieron a la historia esa página en blanco, para escribir en ella, una vez más, el nombre de la institución que es gloria del Uruguay, orgullo de América y asombro del mundo: el CLUB ATLÉTICO PEÑAROL.
Sortilegio de una cruzada de fe, de capacidad, de amor; triunfo de un grupo de hombres que como símbolo de un país de paz, exaltan en un nuevo género de heroísmo, la pasión de un pueblo que los toma como ídolos y ejemplo.
Y así, llevando tras ellos la esperanza de todos, les vimos partir al son de tamboriles, que más que lonjas, reflejaban el latir de nuestros corazones.
Y con ellos nuestra fe, y con ellos la certeza inmensa de una conquista más, de la más grande de las conquistas. (…) Todo el pueblo vibró, todas las banderas se izaron, y en tono de oro y carbón, se alzó en el horizonte de la patria un nuevo arco iris: ¡PEÑAROL CAMPEÓN DEL MUNDO!
Otra vez los colores amarillo y negro. Mostraba su fuerza deportiva este país geográficamente chico, un punto casi, en la inmensidad del mundo, pero de apoyo para una mística, una religión que sólo nosotros mismos vivimos que no todos comprenden, porque Peñarol es eso, es una fuerza que desbordando los límites de una institución, se proyecta y abraza a todo el pueblo e inspira, superando edades y condiciones sociales, la devoción de las grandes causas, el fanatismo que purifica, el amor que impulsa las grandes realizaciones.
Y ustedes jugadores, a quien el destino dio ocasión de hacer honor a los 75 años de Peñarol y a quienes la historia recordará uno a uno a través de las generaciones, cuyos nombres no se olvidarán mientras viva la eterna vida esta grandiosa institución. Supieron cumplir como hombres, supieron cumplir como deportistas, supieron cumplir para orgullo de vuestros padres, de vuestros hijos, de vuestra tierra. Por eso enronquecieron las gargantas, por eso esta parcialidad maravillosa, única en el mundo, teje el Olimpo para sus dioses.
Por eso aquí, en este instante, como a través de toda la ruta, explota la alegría sana con llantos de niños en ojos ancianos y asombro en las pupilas de la nueva generación. Jamás esfuerzo más noble tuvo para sostenerlo pilar más hermoso, jamás un ser con tantas manos al unísono esculpió monumento más perfecto. Jamás en el deporte todo un pueblo quiere hacer sentir su agradecimiento como lo hace ahora, y al decir: gracias por este triunfo, gracias por esta alegría, gracias por ser dignos de Peñarol, repetimos otra vez: los atletas se citaron con la gloria y entonar, al compás de sus esfuerzos, el himno victorioso.
excelente historia. Estoy armando un especial de equipos sudamericanos tricampeones del mundo. Los agrego como fuente en la descripción del video
Como te quiero Peñarol. Me aprendí a fuego tu historia desde que tengo uso de razón. Ya vamos a levantar otra, yo se que sí. Sos lo mas grande, emociona leer esto y el que no vio el partido esta en youtube.. un partidazo, especialmente en el Bernabeu.
en el primer partido no jugo caetano lo suplanto Tabare Gonzalez y en la otra punta jugo Forlan en la revancha en Madrid jugo Tabare x Forlan y en la otra punta jugo Caetano.
esto era peñarol ahora solo es el 30% de lo que relmente era q lindo seria ganarle a un barcelona o real buenisimo recordar loq relmente deberiamos seguir siendo cuando teniamos dirigentes decentes y jugadores q eran realmente guerreros en la cancha y caballeros fuera
IMPECABLE
ESTAS DEBERÍAN SER LAS NOTAS MÁS LEÍDAS Y COMENTADAS EN PADREYDECANO… EN ESTAS LÍNEAS HAY UN PEDACITO DE LA ENORME REALIDAD QUE FORJARON LOS HÉROES QUE HICIERON A PEÑAROL GRANDE EN EL MUNDO. ESTO ES LO QUE HAY QUE RECONOCER; Y NO, UN TATUAJE O UNA DECLARACIÓN PARA LA TRIBUNA.
PEÑAROL ES RECONOCIDO EN TODAS PARTES GRACIAS A ESTOS PLANTELES DE HOMBRES, SEÑORES DEL FÚTBOL, QUE MERECEN EL RESPETO, EL RECUERDO Y EL HOMENAJE DE TODOS LOS HINCHAS CARBONEROS.
El del 26 de octubre de 1966 fue, para mí, el mejor «partido» de la rica y gloriosa historia de Peñarol. Real Madrid 0 – Peñarol 2 (Final Intercontinental – Estadio Chamartín)… 4 a 0; vencimos y humillamos a los poderosos.
Obviamente, una cuestión cronológica no me permitió presenciarlo. Pero esa final fue, sin dudas, el hito más trascendente a nivel fútbol para nuestro club.
Tuve la oportunidad de ver imágenes y audios de ambos partidos: la supremacía absoluta sobre los favoritos y candidatos; la revancha del 60′; los goles de Spencer…
Cada vez que leo o veo alguna referencia de este hito, se me vienen a la mente momentos increíbles con gente de Peñarol. Anécdotas de mi viejo junto a mi abuelo -que hoy alienta desde el cielo- mientras me contaba de esas hazañas. Ellos tuvo la suerte de ver y seguir al mejor Peñarol de todos los tiempos. Se criaron con la rayada conquistando América y el mundo; un privilegio del que puedo sentirme orgulloso porque trato de sostener, con la responsabilidad y el compromiso debido, el legado familiar de representar a Peñarol y sentirme representado por estos colores.
Mazurkiewicz; Lezcano y Varela; González, Goncálvez, Caetano; Abbadie, Cortés, Rocha, Spencer y Joya… bajo las órdenes de Don Roque Gastón Máspoli; sale de memoria. De niño, no sabía muy bien la letra del Himno o la Marcha Mi Bandera (creo que todavía no la sé bien) pero seguro me había aprendido las estrofas «la bandera amarilla y negra, engalanada con 11 estrellas…», el 7 letras, el Juntagargantas y algunas alineaciones como ésta.
Es un honor, un deber, una cuestión de orden, recordar siempre este tipo de instancias que nos llevaron a la cima. Peñarol es un GRANDE del MUNDO. Peñarol le ganó al Campeón Europeo del Siglo XX una final Intercontinental A DOMICILIO: vengó el 1-5 -de 6 años antes- con un global de 4-0 y la vuelta olímpica en la cara de los dueños de la pelota en «El Chamartín» (hoy, Bernabéu).
Veníamos de vencer a River Plate en la final más importante de la Copa Libertadores; DE ATRÁS y contra todo… Ganamos en Montevideo con claridad pero había que viajar al inexpugnable Bernabéu: el Real (Pentacampeón de Europa en ese momento), venía de eliminar al bicampeón vigente (Inter de Milan) en semifinales y con una nueva generación de cracks dispuestos a recuperar la gloria.
Los peñarolenses de la época se burlaban de los hinchas del Madrid que «se quedaron adentro» con los pasajes para el partido de desempate. Se veían ganadores; se sabían vencedores… no habrían escuchado nada del Peñarol de los milagros y las gestas importantes. No había internet para que supieran que ganar «A lo Peñarol» ya era una esencia.
El contexto y la importancia de las circunstancias indican claramente que ese fue el mejor partido de nuestro Club Atlético Peñarol en sus 120 años de Gloria.
Es más, previo al partido del Trofeo Bernabéu que fui a ver en agosto de 2010, estuve en el Museo del Real Madrid, y ahí entendí definitivamente la real dimensión y la trascendencia del título obtenido en 1966.
PEÑAROL NOMÁ’!
E INSISTO. HAY QUE DIFUNDIR ESTAS COSAS. ES HISTORIA, SÍ. PERO ES LA QUE NOS PERMITE INFLAR EL PECHO Y CAMINAR CON LA FRENTE EN ALTO Y LA CONVICCIÓN DE SER GRANDES… RESPETO Y RECONOCIMIENTO A LAS VERDADERAS GLORIAS DEL CLUB.
Excelente la información, la recopilación de fotos, todo muy bueno.
S O L Y M A R
114.722
L.8, 20 Eterna.
real madrid facho,racista y franquista te la hicimos comer doblada VIVA PEÑAROL Y EL BARCA CARAJO
Así se debería jugar la Intercontinental para que los europeitos vengan a los estadios sudamericanos y sientan lo que es el fútbol y no siempre ir a Japón, Arabia dónde es puro negocio. Ida y vuelta así ambos juegan bajo las mismas condiciones y no un sólo partido.
Que momentos hermosos y plagados de glorias y que han llevado a nuestro amado club a lo mas grande del futbol mundial.Ojala todo aquello que se logro vuelva a estas epocas y si fuera en esas dimensiones seria maravilloso,pero para eso hay que trabajar muchisimo y estaria buenisimo que se planteasen este tipos de objetivos a largo plazo .Espero algun dia empezemos a trabajar para ello.FUERZA PEÑAROL¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡¡
El sabado todos al estadio a alentar al CARBONERO para seguir escribiendo la historia !!!!!!!!
PEÑAROL PEÑAROL !!!!!!!!!!
Historia de GLORIAS !!!!!!!!!!
Amigos CARBONEROS ¿Que pasaba cuando algún equipo le hacia un gol al glorioso de esa época? Pues todos aplaudíamos de pie y entonces la máquina se ponía en marcha y un tras otro llagaban los goles y la BARRA MUY AGRADECIDA.para festejar pisa entre Ribera y 18 .Los colores de es camiseta florecen en cada primavera no sean impacientes setiembre está llegando .,Un abrazo a los amigos
siempre me pregunte lo mimo, y me gustaria que alguien que sepa me saque la duda
las intercontinentales q tenemos en el museo es la original o es una replica???
hincha eterno de peñarol que grande con spencer joya goncalvez etc lo he seguido desde niño soy colombiano pero me encanta peñarol , siento orgullo decir que soy hincha de los aurinegros.quisiera tener una camiseta del equipo como hago.