Ramón “Cachila” Arias, ex jugador del aurinegro, habló en “Fútbol a lo Peñarol Radio 1010 AM” sobre el clásico del domingo, como ve al equipo, la importancia de los referentes, como se vive un partido tan importante con Fabián Estoyanoff, los enfrentamientos con Gonzalo Bergessio y hasta de los arbitrajes.

Nunca se fue: “Uno siempre está en contacto con los compañeros, tenemos una linda relación y a los que han llegado nuevos todavía no he tenido trato, pero cuando vaya para allá tendré oportunidad de encontrarme”.

Rivales complicados: “Cuando puedo miro el partido, pero siempre estoy informado. Bergessio es un gran jugador, la capacidad goleadora que tiene es muy grande, tiene sus mañas y me ha tocado enfrentarlo. Fabricio Formiliano ya es experiente y él sabe lo que tiene que hacer, el Topo (Enzo Martínez) es un gran jugador. y tiene mucho para crecer y para darle al club, tiene que volver a encontrar su confianza y recuperar el nivel”.

La arenga de Lolo: “Yo siempre recuerdo ese plantel de Leo (Ramos), porque era ganador. Teníamos al Lolito (Fabián Estoyanoff), que siempre estaba toda la semana hablando del partido. Te decía que estábamos dos goles arriba y daba tranquilidad, para ir al clásico, hacer lo nuestro e irnos a casa contentos. Era así y pasaba así, uno estaba esperando el clásico para disfrutarlo y al término del partido abrazarnos porque se sentía que íbamos a ganar, porque estábamos con mucha confianza, por todo el trabajo que teníamos encima. No confiados, pero sí con mucha confianza por todo lo que trabajábamos. Con Leo teníamos una planificación de novela, y salía todo en la cancha de forma automática”.

Jugadores clásicos: “La fortaleza de Peñarol está en el nivel de los referentes, estos son sus partidos, es cuando más sacan la chapa. Tienen que hacerse notar y esa es la ventaja que veo sobre el rival. Ellos (Nacional), tienen un gran plantel, lo demostraron en el último clásico, pero hay que pensar en lo nuestro, desearle suerte a los compañeros nuestros. Apoyarlos que no nos van a defraudar”.

Comprender a los árbitros: “Nosotros somos los complicados, nosotros le hacemos la vida imposible al juez, ellos deben estar tranquilos. Que arbitren, equivocarnos nos equivocamos todos, y si se equivocan hay que estar tranquilos, todos le erramos, hay que dejarlos que hagan su trabajo. Hay que preocuparse por lo nuestro”.

Todos juntos la banda y los jugadores: “Desearles el mayor de los éxitos a los compañeros, y que la gente nos apoye que los muchachos van a dar la cara”.