El centrocampista húngaro de 35 años llegó a un acuerdo con la entidad decana y ya no es futbolista mirasol, la dirigencia carbonera y el jugador terminaron la relación en buenos términos.

Lo que más destacaron los popes carboneros es la caballerosidad del volante central europeo que siempre manifestó buenas intenciones con el club carbonero. Su salario era muy importante para el club decano que necesitaba respirar de los salarios más altos del plantel.

La rescisión del contrato le costó a la institución de las once estrellas una cifra superior a los 100.000 USD. En su lugar el carbonero espera la llegada (ya está confirmada), de Damián Musto. El argentino tiene un costo salarial menor al del húngaro y viene precedido de mejores pergaminos que Vadócz.