El plantel principal de Peñarol continúa con atrasos salariales importantes. Existe inquietud de parte de los jugadores aurinegros que durante el segundo semestre de 2017 tomaron medidas de protesta ante los haberes impagos.

Terminando el mes de diciembre, los campeones uruguayos no han recibido su remuneración. Lo que más nervios genera en los jugadores es la situación de los compañeros de salario más bajo y que cobran en pesos; muchachos sin tanta carrera y por ende sin un respaldo económico para pasar las fiestas. Al cuerpo técnico de Leonardo Ramos se le debe cinco meses de sueldo.

La nueva directiva de Peñarol se ha puesto la meta de acomodar lo más pronto posible los números del club. Para eso se recurrirá a Walter Pereyra, Isaac Alfie y Eduardo Barbieri, entre otros.

El nuevo gobierno del Dr. Jorge Barrera se debate en reforzar el equipo para los desafíos deportivos de 2017, pero también en cumplir con los compromisos asumidos en el pasado. En enero se cobrará la primera parte de la transferencia de Diego Rossi a Estados Unidos (USD 1.500.000) y también se contará con los ingresos por Copa Libertadores. La realidad es que será difícil pelear internacionalmente si no se pone la casa en orden.

Los hinchas aurinegros quieren la Copa Libertadores de América. Para lograr el sueño se necesita ingenio deportivo pero también económico. Será importante la unión política dentro del club para poder sobrellevar el momento y lograr aquella frase del Cr. José Pedro Damiani: «Obras, triunfos y balances».

Escrito por Wilson Méndez.