El partido ante El Tanque por el Torneo Clausura nos dejó varias postales. La primera fue el ingreso a la cancha de Antonio Pacheco junto a sus tres hijos: Benjamín, Catalina y Florencia. Por primera vez, el capitán entró con familia completa.

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La segunda postal fue la novela de Juan Castillo con la indumentaria. El jugador salió a disputar el partido con la camiseta naranja. El árbitro Falce se la hizo cambiar ya que el color podía confundirse con la camiseta amarilla que estaba usando Peñarol. En el momento del minuto de silencio Castillo fue al vestuario y volvió a la cancha con la camiseta gris y una franja horizontal verde. El árbitro le hizo cambiar nuevamente la indumentaria, ya que ahora se confundía con la remera de El Tanque. Finalmente se puso un chaleco gris de los suplentes. En el segundo tiempo, Castillo salió a la cancha con una remera de entrenamiento negra y un número 1 hecho improvisado con cinta, sin embargo esto tampoco convenció al árbitro, y Castillo atajó en el complemento también con el chaleco gris.

La vieja guardia anotó en el partido y los dos capitanes de Peñarol se frotaron la barriga en el festejo del gol.

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