El 7 de febrero de 1962, Peñarol derrotaba de forma contundente al Barcelona en el Camp Nou, mítico estadio barcelonista, marcando lo que sería una década llena de gloria y triunfos resonantes.

Con motivo de un homenaje que el elenco catalán buscaba rendir a sus dos figuras, Biosca y Gonzalvo III, las autoridades del Barca acudieron en búsqueda de un equipo de primer nivel internacional. Al mirar hacia el continente sudamericano, la respuesta no podía ser otra: Peñarol.

El aurinegro había ganado las dos ediciones que se llevaban jugadas de la Copa Libertadores, era el vigente campeón del mundo aplastando 5-0 al campeón europeo y no encontraba rival a la altura dentro de fronteras.

Así, Peñarol partió a tierras españolas a participar del homenaje a aquellas figuras del Barcelona, pero también, y como seria costumbre en aquellos años, a plantar cara y dejar bien en alto al fútbol uruguayo.

El partido

Las crónicas de la época hablan de una estrategia inteligente del manya, replegándose y buscando contragolpear en los momentos justos. De esta forma, logra los primeros ataques por medio de Juan Joya, en una jugada que salva con lo justo la defensa española.

A los 41 minutos de juego, Moacyr, con un formidable remate desde media distancia logra abrir el marcador a favor del aurinegro. Apenas cuatro minutos, un gol de Pedro Virgilio Rocha es anulado por presunta posición adelantada del delantero. Así finaliza la primera parte, con un Barcelona que se paraba en campo de Peñarol, pero encontraba una defensa fuerte, patrimonio inquebrantable del elenco mirasol.

Al reanudarse el partido, Radiche, arquero de Peñarol en aquel encuentro, se lució de forma espectacular con grandes atajadas que le permitieron al Decano mantenerse en ventaja. Parecía que la victoria duraría poco tiempo, y más aun teniendo en cuenta que Peñarol era un invitado atrevido en fiesta ajena. Sin embargo, a los 34 minutos de la segunda parte, Moacyr de tiro libre volvió a anotar y comenzó a sentenciar la victoria oriental.

Pese a la comodidad del 2-0, aun había lugar para un nuevo festejo de gol de los uruguayos. Esta vez, en una mala salida de la defensa blaugrana, Spencer aprovechó y anotó el definitivo 3-0.

Goleada sudamericana en tierras europeas. Goleada del bicampeón de América, demostrando quien era, sin discusión, el mejor equipo del mundo.

Peñarol: Radiche, González, Martínez, Rotulo, Goncalvez, Aguerre, Rocha (63’ Nuber Cano), Moacyr, Spencer, Sasia, Joya.

Barcelona: Sadurni (45’ Celdran), Segarra, Gensana, Gracia, Verges, Garay (61’ Rife I), Pereda, Zaldúa, Martínez, Villaverde (45’ Rife II), Vicente.

Goles: 41’ Moacyr (P), 79’ Moacyr (P), 87’ Spencer (P).