El equipo dirigido por Mauricio Larriera empató 1 a 1 ante Villa Española como local. Agustín ‘Canario’ Álvarez hizo el único gol carbonero, tras una muy buena asistencia de Máximo Alonso, pero tras un grosero error de Kevin Dawson el rival empató en la hora. Fernando Falce no cobró un claro penal a favor de Peñarol y al ‘Canario’ le anularon un gol por un offside que no fue.

Lejos está este equipo del rendimiento que mostraron hace unos meses, en la Fase de Grupos de la CONMEBOL Sudamericana, que rozó la perfección. Ahora le cuesta ganar a los equipos de nuestro campeonato y cuando lo hizo, en varios encuentros le faltó autoridad.

Primer tiempo

Hoy hubo una mezcla de factores que influyeron notoriamente en el resultado. Principalmente, la falta de una idea de juego. No hay sistema, no hay conexiones y dependemos mucho de las individualidades.

Del partido no hay mucho para analizar, porque el rendimiento fue pésimo. Aunque la diferencia entre los planteles hizo que el Decano tenga sus chances de gol. Por ejemplo, un cabezazo de Kagelmacher, un disparo de Olivera que pasó muy cerca del vertical y sobre todo el gol mal anulado al ‘Canario’ Álvarez que picó casi un metro habilitado y aún así el línea vio offside. Ni polémica hay en la jugada.

Segundo tiempo

En la segunda mitad todo siguió igual, y algunas jugadas personales acercaron al Carbonero al arco rival. Así llegó el gol de nuestro goleador, Agustín Álvarez Martínez. Máximo Alonso se quitó a su marcador y de derecha le puso un gran centro para que el delantero ponga a Peñarol arriba en el marcador y aumente su saldo de goles desde que debutó.

Sobre los últimos minutos pasó de todo. Canobbio pifió un rebote dentro del área y recibió un patadón de parte del defensa, pero a Fernando Falce le pareció una jugada limpia y no sancionó penal. Dos minutos más tarde, un grosero error de Kevin Dawson le costó el triunfo al aurinegro, cuando dejó pasar un envío al área por parte del arquero de Villa Española que se terminó colando en el fondo de la red. Fue un golazo, aunque el disparo nunca haya tenido esa intención.

Ahora toca el mes más esperado y seguramente el más importante del año. En el próximo partido iremos después de varias excusas al Gran Parque Central a visitar a Nacional. Como en todos los Clásicos, no se acepta otro resultado que no sea una victoria.