Desde su afiliación a la FUBB en 1940, hasta el feliz retorno que nos encontrará compitiendo en la próxima Liga Uruguaya 2020/21, la historia de Peñarol estuvo plagada de gloria, y su andar con la naranja merece ser contado.

Los primeros pasos ya dejaban ver que no se trataba de un equipo cualquiera. La camiseta más gloriosa del deporte uruguayo se abría paso en un nuevo desafío, dejando en claro que llegaba para quedarse y hacer historia. La rápida escalada de Cuarta de Ascenso a Primera en 3 años, así lo indican.

La temporada 1942 no fue una más en la vida del club, ni del deporte uruguayo. Aquel año, y en el marco del triangular «Ciudad de Florida», disputado por los equipos de Peñarol, Nacional y un seleccionado local, tuvo lugar el primer clásico de basketball de la historia. Finalmente, la victoria se la llevó el aurinegro, que también se coronaría campeón invicto del triangular.

El carbonero siguió preparándose para la pelea por acceder a Primera División, y así fue como también ganó el “Campeonato Adolfo Perez Olave”, derrotando a Montevideo (43-24), Capitol (29-23), y a Neptuno en la final (31-23).

Pero el plato fuerte llegaría con el Torneo Federal de Segunda de 1942. Peñarol daba sus primeros pasos en el basketball uruguayo y venia en subida, mientras que Nacional ya se había consagrado campeón del Federal dos veces (algo que nunca mas lograría desde la llegada de Peñarol) y comenzaba una larga serie de descensos, que lo posicionarían como un equipo de los denominados “chicos”.

La primera rueda constó de 11 partidos, de los que se ganaron 8 y se perdieron 3. La remontada se lograría en la segunda parte del campeonato, donde Peñarol ganó todos los partidos en disputa, logrando de esa manera, el ascenso.

Como lo narran las crónicas de la época, y certifica la tabla de posiciones, el cupo a Primera División se debió dirimir entre las camisetas tradicionales de nuestro país. El clásico de la segunda rueda, resultaba decisivo para determinar quien se quedaría con el titulo y el derecho a militar en Primera Division. Como no podía ser de otra manera, la victoria fue aurinegra por 48-35, y se le ponía un broche de oro a una excelente campaña, para acceder al circulo de honor por primera vez, con un récord de 19 victorias y tan solo 3 derrotas – todas en primera rueda -. Peñarol se coronaba así, campeón en años consecutivos de los torneos de ascenso de 4ta, 3ra y 2da División.

Por su parte, el tradicional rival se quedaría en la B hasta 1948 y, desde esta divisional, debió ver como Peñarol se coronaba Campeón Federal de 1944.

@PenarolPapa