En este último tiempo palabras y frases como ética, honestidad, el bien del fútbol, cultura, entre otras, han sonado constantemente, casi que transformándose en un cliché bastante ridículo y agotador para el hincha. En el día de hoy te contamos una historia que muchos tal vez no sepan, y que se remite al año posterior al Quinquenio del tradicional rival, lo cual deja un manto de dudas y sospechas en la forma en que ese club obtuvo cinco años seguidos el campeonato local.

Sin hacer demasiado preámbulo, citamos a continuación un capítulo dentro del libro Memorias de la Pelota, del prestigioso periodista Alfredo Etchandy, quien a pesar de ser confeso hincha de Peñarol, siempre se lo ha destacado por su imparcialidad y objetividad a la hora de brindar su opinión a las diferentes audiencias.

Soborno en el fútbol…
LA DENUNCIA DE SAGASTUME

Sucedió en 1944 y causó una verdadera conmoción en el fútbol uruguayo. El lateral de Montevideo Wanderers, Julio Sagastume, denunció un intento de soborno y puso en marcha una serie de consecuencias lógicas ante la gravedad de la información.

El jugador declaró que Roberto Pissoni Rivero, a quien conocía de una peluquería de la Avda. 8 de Octubre, lo encontró en un café de la Curva de Maroñas y le solicitó para hablarle en privado. Allí, le ofreció de parte de hinchas de Nacional la suma de quinientos pesos para que su desempeño no ofreciera obstáculos para el triunfo tricolor en el partido con los bohemios.

Ante ello, el futbolista advirtió a los dirigentes y se realizó la denuncia policial, concurriendo a una segunda cita con la compañía de dos funcionarios de investigaciones a efectos de comprobar el ofrecimiento. Una vez que se logró el objetivo, Pissoni fue detenido y luego de un extenso interrogatorio, sostuvo que actuaba de parte de Juan Novaro, Gerente del Club Nacional de Football, quien también fue detenido. Dicha persona aceptó lo ocurrido y dijo que lo hacía por amor a su institución, pero en forma personal, soslayando cualquier participación de los dirigentes albos.

Ante el giro de los hechos y distintas denuncias recibidas sobre casos anteriores con apuestas incluidas, se realizó una profunda investigación policial para esclarecer esos episodios, pero a pesar de la detención de varias personas no se pudo comprobar la relación de los involucrados en esta situación con los sucesos ocurridos en el pasado.

Mientras los imputados fueron puestos a disposición de la justicia, el Presidente de Nacional, Dr. Rodolfo Gorriti, se mostró apesadumbrado por la situación repudiando la misma. La Comisión Directiva hizo una declaración pública con la siguiente resolución: “1º) Suspender hasta tanto se aclaren en todos sus detalles los sucesos acaecidos, al Gerente de la Institución. 2º) Hacer pública declaración de su repudio a la actuación que haya cabido a las personas participantes de este desgraciado episodio que envuelve a la Institución. 3º) Ponerse enteramente a disposición de la Asociación Uruguaya de Football a los efectos que juzgue conveniente. Montevideo, setiembre 16 de 1944. Firmado Rodolfo Gorriti, presidente. Santiago Acuña Possolo, secretario”

Un hecho triste que se hizo público gracias a la honestidad y valentía de Julio Sagastume que efectuó la denuncia del caso. Muchas veces se habló de la existencia de este tipo de situaciones pero en pocas ocasiones se llegó a la comprobación de las mismas. En esta oportunidad, todos conocieron los sucesos por la amplia cobertura periodística y los involucrados resultaron desenmascarados, quedando a la disposición de la justicia competente.

«La Cultura Nacional que pregonan los dirigentes de Nacional, es una mentira»
José Luis Palma, presidente de Liverpool.

“No vengan con eso de Cultura Nacional. No existe”.
Hugo De León. Gloria de ellos.

Como dice un gran amigo, “no se deje engañar, en casa se lo van a agradecer”. Nosotros te seguiremos contando La Verdad de la Milanesa.