Como era de esperarse, en las últimas horas comenzó a aparecer el rumor de una posible salida de Pablo Bengoechea del club. En primer lugar, la versión de prensa hablaba de una reunión de la dirigencia de Peñarol para tratar el tema. Lo curioso es que varios periodistas volcaron la información al mismo tiempo. Posteriormente, la misma prensa deslizó la posibilidad de que la reunión fuera solamente en el entorno más íntimo de Damiani. Padreydecano habló con Rodolfo Catino, Jorge Barrera, Marcelo Areco, Ignacio Ruglio y Ricardo Rachetti, quienes dijeron que no participaron de ninguna reunión. En el medio, se dijo que Ahuntchaín tenía las potestades para tomar la decisión. Luego se dijo que Ahuntchaín no participó de ninguna reunión.

Mientras tanto, la aparición de posibles candidatos para asumir en el cargo. Por un lado, el manoseo a Pablo Bengoechea, un ídolo de la institución como jugador, que no se merece esto, más allá de gustar o no gustar su manera de dirigir al equipo. Por el otro, el manoseo a los nombres de Jorge Da Silva, Guillermo Almada, Gustavo Matosas, entre otros. Hasta un periodista llegó a decir que era candidato Eduardo Acevedo, sí, así como leen, Eduardo Acevedo. ¿A alguien se le ocurriría pensar que un directivo aurinegro sugeriría ese nombre?

En el medio, el gran rehén de esta situación, Peñarol, que a tres semanas de que comience la competencia oficial vive un momento de inestabilidad que es contraproducente para el futuro deportivo. Se podrá pensar que hay que cesar a Pablo ahora, quienes dicen que el momento era en diciembre, y hasta quienes dicen que era después de la final. Hay otros que dicen que hay que mantenerlo.

Todas las opiniones son válidas, pero los hinchas nos merecemos saber la verdad, y por sobre todas las cosas, que no se arme un circo de esto o que nos tomen el pelo, ni desde afuera ni desde adentro. Los dirigentes tienen que tomar la decisión correcta y ojalá que sea la mejor para el futuro del club.

Escrito por Rodrigo Misa